La deslealtad puede comenzar en la propia sombra. Qué mundo, inmundo. Ríete, cómica mía. Alza la pierna como si fuera una bandera. Identidad ante todo, patriotismo. Media vuelta y march…
Por Rolando GABRIELLI
Folletín, sigue respirando boca a boca, boquita pintada, mi bicicleta del amor, y pe-da-lié-mos más allá del barranco, mi Super Star, dulce mora, alelí. (El mundo ya no sabe estar, ni cómo, ni cuándo, ni dónde, de pie, acostado, bocarriba lleno de moscas, en un ataúuuuuuuuuuud, finalmente en reposo).
Todos de pie, viene el himno. Un silencio sepulcral que se siente en la mano en el corazón. Todas las patrias, la patria. La deslealtad puede comenzar en la propia sombra. Qué mundo, inmundo. Ríete, cómica mía. Alza la pierna como si fuera una bandera. Identidad ante todo, patriotismo. Media vuelta y march,.. Folletín, vamos a estallar. Pasa el vals, el bolero, voy al bar: Tango. En un carrusel dos enanos escriben un poema chiquitito, que no alcanza a ser memorizado porque se les escapa del pensamiento y corre por un río largo de palabras que no logran hacer un verso.
La poesía es misterio. Un no sé qué y además indefinido. Tan preciso el insomnio que protege el sueño como la rueda que recorre ciega el camino que conoce de memoria. Inefable, la poesía y tú, por eso eres Mujer-Poema. Mujer-Musa, verso libre. La piedra es el poema. ¿Tú ruedas sin la palabra R?
La poesía es el guante tibio de la noche, un pájaro rojo atrapado en un muro blanco, un escupitajo en el ojo a los dueños de la muerte, que la alquilan con vista al más allá. De este lado, el paraíso se ejercita en el arte de la sobrevivencia. Los muertos rompen el récord de frialdad. Hot Tin Roof (La gata sobre el tejado de zinc caliente), nos mira acuartelada en sus instintos felinos.
Es agosto 11, la oruga cree un poco menos en la ventaja de ser mariposa. Muerte, duérmete en otro lado. El Folletín se arroja a los brazos de Morfeo, pero no de la cantante calva. Sillas, sillas. El sol cruje como un huevo frito. Las espadas se guardan hirviendo en la noche de Bizancio. Un toro ciego se arroja contra el mapa árido de España.
Que bella performance en el agujero de Chile, bajo la niebla de Santiago, gris Sur, país declarado detenido en el pasado político que no arranca de su espanto.
Bonnie and Clyde se turnan el Hospital de Chile para evadir la justicia. Gatilla el 911, es una emergencia total: 11 de septiembre, S.O.S. Un montón de huesos de desaparecidos aplauden, esta nueva performance del Dúo Evasor: Mr. and Miss Impunity. Santiago, de Extremo en Extremo, el hazmerreír de la justicia. Un juez mira por el ojo de la cerradura equivocada y ve al tirano jugando un solitario con la muerte y de pronto se levanta de su silla de ruedas y se pone a bailar.
Muerte, otra cosa es con guitarra, canta tu General / respeta los galones y vete a pasear / No pierdas el juicio como yo / mis cuentas no son tus cuentas / Bajo fianza, que confianza con Lucía (La muerte grita en off: No hay tu Tía General, la hora está llegando, estamos en O’clock). Qué saben de mí / ni como me llamo / en verdad / (El coro mortuorio: General, ya no hay marcha atrás). Llámeme Daniel, el Travieso / (La muerte le dice al oído: Augusto, te diste gusto, usando el 11). Síiiiiiiii, 11 sociedades con acciones al portador / para percibir ganancias no declaradas / 11 combinaciones para ocultar la real / 11 de septiembre de 1973 / el día de la muerte. (Aplausos en off, la Muerte le abraza, y le dice: ya te llevo, mi gran juglar). El Nono Capo del Gran Clan, Pater-Familia, retorna en su silla triunfal / No más hospital / y ahora confesional: “Yo entregué, por razones de prudencia, ya que sería objeto de persecución y hostigamiento político, a instituciones profesionales extranjeras los ahorros de toda mi vida” (la muerte le sonríe, y le dice: Abuelo evasor / pícaro / bribón / del Riggs al Espíritu Santo / ¿Esa es tu religión?). Folletín de Chile, General. No nos deja de asombrar / con más recursos que el Loco Pepe / ¿No se piensa fugar? Baja el telón, Augusto / este susto debe terminar / suelta, suelta / si hay más / asume la verdad / que a mí no me queda cuerda ya. / La justicia es un show / Lucía, Lucifer, amor / te agarran la cola / para después pedirte perdón / Yo les digo: paredón, paredón / Den vuelta la página / que la hoja la tengo yo / Inmóvil la flor / La Justicia, soy yo.
El Folletín más largo que Chile en la historia de Chile en el Chile post Bonnie and Clyde. La historia siempre continúa.
Una canción desesperada
Bonnie, estos son mis ahorros / adminístralos / my wife, que dura es la life / es lo único que nos queda / todo desaparece, nada será igual / Bonnie, tú y yo / la guerra sin cuartel / no es igual / me voy al hospital / infarto cerebral / Mi Travieso Daniel / ya volverás tan sano como ayer / Yo creo en ti, mi Príncipe Valiente / y me vendrás a rescatar / Capuchinos para dos / suena a Tango y es Bolero / la cárcel no es un sueño / Ay Bonnie, cuídate del Cocema / que cuando el río suena / piedras trae y de las buenas / Las cuentas claras conservan la amistad / no olvides esa máxima / es por seguridad / Ya no soy el Supremo / ni la Justicia / aterriza, / Este último envión / va de prisa / y nos ha llevado al campeón / Capuchinos, Capuchinos / No somos monjes / ni asaltantes de caminos / lo dije en Londres / fasilficadores, evasores, son los pingüinos / Este es el pago de Chile / por mis servicios prestados a la Nación / Evasión, evasión / que cuentas / ni que cuentos…
Oh, soldado, no has muerto
Oscuro, el día oscuro,
atravesado en la noche
de Chile
No invierto un centavo
en la tragedia
Que el neoliberalismo
pague esta deuda eterna
El primer soldado de Chile
se orinó en la patria,
ya muerta.
¿Se arrepentirá
cuando carguen su ataúd
los desaparecidos de Chile?
¿Y si un cuervo levantara
su capa y volaran
hacia la muerte
con sus alas negras
de sátrapa?
¿O si la noche
muerta de risa
se lo llevara?
Aplausos, aplausos,
bis, bis.
La noche de Chile
Chile,
la noche de Chile,
es rojo copihue
de desencanto,
luz de sus doradas ánimas,
el largo túnel de Chile.
Desierto, mar, cordillera,
grandes lagos, hielos muertos,
el sol de Chile,
una negra bocanada.
2
Sangrantes coplas,
del largo mantel blanco
de Chile.
Memoria, memoria,
de los muertos,
la dura piedra,
de los vivos,
estos caminos inciertos.
3
Chile,
tu noche secreta,
rojo canto de amapolas,
rosa del negro espanto,
que mueran los vivos,
que nazcan los muertos.
Chile,
la insurrección del miedo,
tu cuerpo tirado por carrozas
de pétalos rojos, aire
de estos huérfanos,
tan solos en el viento.
4
Chile, Sí, ay, ayayay,
quién te roba tus pies,
corta tus manos,
ciega tus ojos,
te convierte en ataúd,
campo santo,
invierno y primavera.
5
Chile,
tus noches sangrientas
Chile,
adónde tu larga noche
de espanto
Chile no hay noche
más oscura
que la noche de Chile
y todo su oscuro espanto.